Con los ingredientes más sencillos se pueden hacer maravillas, recetas muy económicas y repletas de salud. Elaborar y transformar los alimentos para obtener rápidamente sopas de fácil digestión que estimulan, protegen, depuran y nos fortalecen . Entra en calor con esta sopa que te propongo.
Hace unos días que tenía en la nevera unas cuantas remolachas, algún día preparé un zumo licuado, otro día rallé una por encima de la ensalada, pero seguían quedando unas cuantas que estaban a punto de ponerse feas, así que decidí preparar algo con ellas, pero en esta ocasión un plato bien caliente es lo que más nos apetecía, las cenas de otoño-invierno es lo que a uno el cuerpo le pide, ¿verdad?
Esta sopa tiene muchísimas propiedades y beneficios para tu salud, además de estar muy rica, y sabrosa. Realmente es una oportunidad para comer algo diferente a aquello que estamos acostumbrados, al menos el color del plato es bien impresionante y precioso, este rojo-rosado tan intenso.
Esta sopa resulta ideal para equilibrar la tensión arterial, también mejora la circulación y alivia el estreñimiento.
La remolacha, a simple vista parece poco apetecible, pero te recomiendo añadirla a tu dieta, es un hortaliza que presenta un grupo de antioxidantes singular, las betacianinas, estos pigmentos le otorgan su intenso color y sus excelentes propiedades: apoyan la función hepática, mejoran la circulación y purifican la sangre. En muchos países al ser un alimento tan nutritivo lo usan para las convalecencias, para combatir la fatiga y reforzar la inmunidad. Ah, por cierto no tires sus hojas, son incluso más ricas en nutrientes que la raíz, aprovéchalas para prepararte un zumo, un batido o para añadirlas a la ensalada, favorecen la digestión.
Ingredientes – 4 a 6 raciones
3 remolachas medianas
2 zanahorias
1 puerro
1 cebolla
1 trozo de nabo daikon
3 dientes de ajo
700 ml de caldo vegetal o agua aprox.
sal y pimienta negra recién molida
3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
4 cucharadas de yogur kefir o cualquier otra variedad
Preparación
1. Calienta el aceite de oliva en una cazuela grande, añade la cebolla, el puerro y los dientes de ajo, una pizca de sal y deja sofreírlos hasta que se ablanden. Luego incorpora el resto de ingredientes cortados a trozos pequeños: la zanahoria, el nabo y la remolacha, deja cocer 2 o 3 minutos más.
2. Agrega el caldo vegetal y cocina durante unos 20 minutos o hasta que las verduras estén blandas. Ajusta de sal y añade la pimienta al gusto. Reparte la sopa en boles individuales y añade una cucharada de yogur en cada uno de ellos, justo antes de servir.
Si no te gusta encontrar trozos de verduras en la sopa, puedes triturar todos los ingredientes en una batidora y servirlo en forma de crema, en este caso siempre le añado un poco de levadura nutricional, le queda muy bien.
No te olvides del yogur el contraste dulce de la remolacha con la acidez del yogur queda fantástico y hace que el plato sea de 10!!
Gabriella Gal
Hace mucho estaba buscando una receta buena de remolacha y al fin lo encontre. Muy rico, muchas gracias por compartir.
elenavidal
Muchas gracias Gabriella, me alegro que te haya gustado